En la siguiente entrevista, Laia Belles, psicóloga colaboradora del INSTITUT D’ASSISTENCIA PSICOLOGICA I PSIQUIATRICA MENSALUS, comparte con nosotros algunas ilustraciones de Agustina Guerrero y resalta la utilidad de trabajar con ellas en el marco de la psicoterapia.
“Las imágenes pueden convertirse en una potente herramienta terapéutica en aquellos casos en los que, sin necesidad de demasiadas palabras, queramos transmitir un mensaje que promueva un cambio en la dinámica del individuo”
“Las ilustraciones favorecen la capacidad de insight e introspección de un modo más rápido y espontáneo”
¿Cuál es el poder de las ilustraciones en psicoterapia?
Las imágenes pueden convertirse en una potente herramienta terapéutica en aquellos casos en los que, sin necesidad de demasiadas palabras, queramos transmitir un mensaje que promueva un cambio en la dinámica del individuo.
Paralelismos con objetos, hábitos, situaciones cotidianas, etc., ayudan a conectar con el objetivo que deseamos conseguir, habitualmente más “abstracto” y difícil de definir.
Imágenes que ponen de manifiesto a la persona como elemento activo de un proceso son clave:
Por ejemplo, en esta imagen vemos a una chica de brazos cruzados que observa un ovillo, se muestra pensativa, decide cogerlo, empieza a deshacerlo y, finalmente, convierte aquel “enredo” en algo útil y funcional que le permite incluso disfrutar.
¿Cómo se utilizan imágenes como ésta en psicoterapia?
A partir de ilustraciones como la que hemos mostrado podemos realizar paralelismos con la vida real: “en tu vida, ¿Qué es este ovillo?”, “¿Hace mucho tiempo que lo observas de brazos cruzados?”, “¿Qué tendría que suceder para que descruzaras los brazos?”, “¿Qué sería en tu vida el tomar el ovillo y empezar a estirar del hilo?”, “¿Y saltar a la comba con el hilo?”, etc.
Otro ejemplo de imagen que muestra a la persona como un elemento activo es la siguiente:
ejemplos de ilustraciones para psicoterapia
En este caso, la ilustradora muestra una persona que, con esfuerzo y decisión, empuja un gran bloque negro para dar paso a un escenario rico en color. Estas imágenes tan claras ayudan a la persona a conectar emocionalmente con la parte oscura que tantas veces ha aparecido en terapia y con la necesidad de mostrarse activa, tanto en el proceso terapéutico como en su lucha contra el malestar. Con este tipo de conexión conseguimos un anclaje: la persona conectará con la imagen cuando aparezca el malestar y recordará qué posición debe tomar.
¿Qué otros recursos se pueden trabajar en psicoterapia a partir de las ilustraciones?
Un recurso que reforzamos visualmente es la capacidad de decisión y la flexibilidad de actuación. En ocasiones, creemos que existe un único camino para conseguir nuestros objetivos y, si no funciona, tiramos la toalla. Este hecho puede disminuir nuestra autoestima, aumentar la inseguridad, dificultar el perseguir nuevos retos, menguar la capacidad de automotivación, etc.
La protagonista se muestra triste al no conseguir que su globo se mantenga en el aire. Ese malestar promueve una reflexión y despierta una idea. Con ingenio y motivación encuentra una segunda opción que le permite sentir el globo en el aire, hecho que le produce bienestar y evidencia el logro.
Nos comentabas que las ilustraciones, especialmente, favorecen la capacidad de insight e introspección de un modo más rápido y espontáneo. ¿Por qué?
Recientemente, un artículo de la revista Muy Interesante explicaba:
“En muchísimo menos de un segundo nuestro cerebro es capaz de procesar las imágenes. Un estudio reciente llevado a cabo por científicos del Massachusetts Institute of Technology (MIT), ha comprobado que el cerebro humano es capaz de procesar imágenes completas en tan solo 13 milésimas de segundo (…). Como explica Mary Potter, “el hecho de que podamos procesar tan rápido nos indica que lo que la visión hace es encontrar conceptos”.
La rapidez con la que el cerebro procesa una imagen nos indica el impacto que la misma puede llegar a tener sobre la psique. Si a ello le sumamos un significado que llame la atención, despierte interés y esté repleto de contenido, tenemos la combinación perfecta para promover la reflexión y el cambio más espontáneo.
Por ello, en terapia, cuando buscamos que un mensaje llegue alto y claro y, además, sea recordado, las ilustraciones significativas se convierten en uno de nuestros mejores aliados.
Así pues, ¿en psicoterapia también podemos afirmar que “una imagen vale más que mil palabras”?
Por qué no. Las ilustraciones pueden transportarnos rápidamente a un estado emocional ya que ayudan a conectar con nuestro mundo interior. Las personas, En ocasiones, no saben expresar con palabras lo que sienten, quizá porque no se han permitido el tiempo suficiente para que la información emocional ubicada en el hemisferio derecho pase al hemisferio izquierdo (encargado de dar significado a la experiencia).
En definitiva podemos afirmar que aquellas imágenes que se captan rápidamente crean insight (“darse cuenta de” y tomar conciencia) y aumentan las conexiones que permiten comprender conceptos.
En el ámbito de la psicoterapia, ante la pregunta: “¿Que té transmite ésta imagen?”, cada persona da un significado diferente relacionado con su forma de ver el mundo y el momento que está viviendo. En la imagen el individuo se reconoce, se siente comprendido e identificado.
Dicho esto, me gustaría terminar la entrevista con la siguiente viñeta. En ella podemos ver cuatro imágenes donde se representa un proceso emocional. Algunas personas relacionan las ilustraciones con la tristeza, otras con la angustia o el miedo. Esta historia permite, a aquel que la mira, sentirse identificado con una problemática, plantearse cambios a partir de escuchar sus emociones y respirar esperanza de cara al futuro.
ejemplo de ilustraciones para psicoterapia
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