FALTA DE INTERÉS/EXCITACIÓN SEXUAL FEMENINA
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¿QUÉ ES LA FALTA DE INTERÉS/EXCITACIÓN FEMENINA?
La falta de deseo sexual es un bajo nivel de interés en las relaciones sexuales, donde la afectada no responde al deseo de actividad sexual. Esta problemática también se expresa con una baja activación de fantasías o pensamientos sexuales o eróticos, generando una apatía o desinterés a mantener relaciones. Por otro lado, se ve reducida o no existe excitación o placer sexual durante las relaciones sexuales y tampoco hay o disminuye la respuesta ante una invitación sexual o erótica (escrita, verbal, visual, etc.).
Existen múltiples explicaciones por las cuales pueda producirse un descenso o pérdida de deseo o excitación, algunas de las más comunes hacen referencia a factores psicológicos como la depresión, la ansiedad, el estrés o problemas de relación y/o experiencias insatisfactorias (p. ej., por falta de habilidades sexuales o mala comunicación de sus necesidades). El uso de ciertos fármacos, como los ISRS, algunos anticonvulsivos y betabloqueantes, anticonceptivos orales o la quimioterapia pueden reducir el deseo sexual, al igual que el exceso de alcohol. Las fluctuaciones y cambios en los niveles de las hormonas típicas de periodos vitales como la menopausia, el embarazo o con el ciclo menstrual pueden afectar el deseo sexual. Por otro lado, la vaginitis atrófica, la hiperprolactinemia o patologías como la diabetes o la hipertensión pueden interferir con la excitación sexual.
Identificar la falta de interés sexual en la mujer
Tendremos en cuenta los siguientes aspectos:
- Tener poca o nula sensación subjetiva de excitación sexual.
- Indiferencia o ausencia en la percepción subjetiva del placer.
- Posible evitación a estímulos o situaciones de carácter sexual.
- Alteraciones en las relaciones interpersonales y motivacionales.
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Terapia Sexología Online Barcelona
¿CÓMO TRABAJAMOS?
Antes de iniciar el tratamiento es necesaria una exhaustiva evaluación clínica individual para determinar con precisión las características y posibles causas de la pérdida o la falta de excitación o deseo sexual, ya que si se debe a factores secundarios por el uso de determinados medicamentos o por la presencia de otras patologías se trabajará en coordinación con otros profesionales o especialistas. Dicha evaluación, también ayudará a establecer los objetivos personalizados que se pretenden alcanzar en la intervención terapéutica.
Una vez realizado el diagnóstico, el tratamiento individual combina técnicas cognitivas, emocionales y conductuales, con el objetivo de mejorar la confianza y la intimidad en la relación de pareja. Se ayudará a la mujer a aprender a concentrarse durante la actividad sexual y a identificar y comunicar qué le estimula.
El tratamiento en pareja tiene como objetivo la participación de los dos miembros para facilitar la colaboración e implicación de ambos en una problemática que afecta a la vida sexual común, proporcionando pautas que permitan generar nuevos recursos que garanticen una adecuada interacción sexual y la satisfacción en esta área.
En algunos casos es conveniente complementar o combinar el tratamiento psicológico con un tratamiento farmacológico. El equipo de psiquiatras del centro trabaja coordinadamente con el equipo de psicólogos para poder hacer una valoración diagnóstica conjunta y alcanzar los objetivos terapéuticos definidos.
Los objetivos del tratamiento van destinados al aprendizaje de técnicas de recuperación del foco y el estímulo sensorial, de habilidades de auto estimulación, al conocimiento del propio cuerpo y sus reacciones y la interacción sexual progresiva con la pareja.